martes, 28 de julio de 2009

COMUNIDAD DE LOS HORCONES

Esta comunidad tiene un nombre que jamás había escuchado, así que para entender este nombre es mejor averiguar qué significa horcón, el significado es: horca grande de labradores. Partiendo de ese significado, la comunidad de los horcones es una comunidad de labradores, y al meditar qué hace un labrador, éste: prepara la tierra, siembra, riega, cuida y cosecha.

La tarea de labradores, es lo que a mi punto de vista hacen éste grupo de psicólogos conductistas y sus familias en la restauración o cambio de conducta autista de los niños, jóvenes o adultos cuyos familiares buscan respuesta a un cambio conductual, ya que ellos tienen a la conducta autista como una área de investigación. Al parecer, la mayor demanda son niños. Los horcones es en realidad una comunidad terapéutica.

Este grupo de profesionales conductistas, dan un tratamiento individualizado considerando que cada individuo es diferente de otro, y han formado un gran equipo de trabajo que permite que el paciente pueda experimentar: estar en familia, en el parque jugando, en escuela estudiando, en fin han tratado de crear todos los ambientes posibles en los que un individuo desarrolla su vida cotidiana de acuerdo a su edad. De esta manera, están dando la oportunidad de que aflore su yo y puedan ser ellos mismos, trabajando mancomunadamente por sacar adelante al pequeño (en caso de necesitarlo entran a formar parte de esta terapia hasta los hijos de los profesionales tratantes).

La consigna de ellos es enseñarle al niño todas aquellas conductas que le ayuden a ser mejor persona porque se considera que los niños con problemas de autismo pueden aprender conductas apropiadas, por ello, los horcones recomiendan que apenas vean los padres síntomas en el niño-a como: que parezca no escuchar, al darle instrucciones no las cumpla, se aísle de los demás, y que emplee mucho tiempo ejecutando algo, que empiece a educarlos aún sin esperar el diagnóstico.

Estos visionarios, trabajan reforzando las conductas apropiadas y extinguen o corrigen la inapropiadas con una forma diferente de tratar a sus pacientes, han roto el molde de tratarlos, pues en vez de hacerlo en el típico “diván”, ellos tuvieron la creativa idea de formar un comunidad donde ellos (pacientes) tengan la oportunidad de formarse para poder tener un trato interpersonal más adecuado. Por ello, se les considera un modelo de comunidad enseñante.

Cuando diagnostican a un niño con problemas de autismo, lo más común es que los padres empiecen a culparse de quién fue que “aportó” un mal gen. En realidad, dicen, ni los padres ni nadie tienen la culpa de la conducta autista del niño, sin embargo si pueden desempeñar un papel muy importante en enseñarles conductas apropiadas para que tengan un mejor desenvolvimiento interpersonal.

Comúnmente se les suele llamar niños autistas cuando realmente éstos no tienen autismo, sino una conducta autista por su interacción con el medio que le rodea, de manera especial con su medio social (del que los padres forman parte). Insistiendo en el tema de autismo, éste, no es algo que tenga dentro de sí el niño, sino que es una manera de comportamiento.

Realmente bajo ningún concepto es igual, un niño que ha sido diagnosticado con conducta autista que: hable, muestre afecto y lo reciba, siga instrucciones, juegue con amigos, etc. a otro con el mismo diagnóstico y que se auto estimule, aísle, no hable ni se pueda relacionar con otros. Para que todo lo que el niño logre en la comunidad de los Horcones no se venga abajo, es necesario que sus padres tomen parte activa en la educación de su hijo.

Puedo decir que esta comunidad es digna de ser emulada, ya que es una manera de ser parte de una solución a conflictos que enfrentan muchos padres de niños con características de conducta autista o ya diagnosticada, porque se les da a éstos la oportunidad de tener una calidad de vida diferente. Quizás habrán personas que discrepen con este sistema de tratamiento, pero definitivamente al parecer da resultados positivos, logrando mitigar en algo o en mucho el dolor de aquellos que deben vivir situaciones como la que me estoy refiriendo.

Cuando digo que es digna de ser imitada, lo hago también pensando en la pasión que seguramente le ponen cada uno de los miembros horcones a su profesión, que imagino que más que un trabajo, es un autorrealizarce no solamente como profesional sino también como seres humanos, y que además, son agentes multiplicadores porque al formar a una familia comprometida con lo que hacen y con sus tratados, están formando una generación con un concepto diferente de vida y de servicio. Porque como reza un dicho popular “el que no vive para servir, no sirve para vivir”.

2 comentarios:

  1. Estuve este fin de semana en la Comunidad de los Horcones, una experiencia digna de compartir, aunque la información y el tiempo fueron escasos, provoca la excusa ideal, perfecta para regresar.

    Gracias a CESUN universidad y al Maestro Psic. Hermes Millan Redin coordinador de la carrera de Psicología por la organización de ésta actividad.

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  2. Hola, me pueden decir como poder comunicarme con ellos? Tengo el Sindrome de Asperger, y me gustaria entrar en esta comunidad, y mirar si pueden ayudarme...

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